sábado, 13 de febrero de 2010

Mitos y verdades sobre las baterías (y II)

En el anterior artículo vimos las baterías de ión de litio. Hoy veremos el otro tipo que podemos encontrar con cierta frecuencia.

La baterías de metal-hidruro se comportan de forma muy diferente a las de ión de litio. Proporcionan menos corriente y son más pesadas, pero como contraprestación son más duraderas (yo tengo aún en funcionamiento pilas recargables compradas hace más de diez años). Tienen efecto memoria, lo que hace necesario efectuar ciclos de carga completos. Por tanto, es necesario esperar a que se agote la batería por completo y luego, esto es importante, cargarla de una sola vez, sin interrupciones. Como podéis ver, esto es justo lo contrario de lo que hay que hacer con las baterías de ión de litio.

Una cosa a tener en cuenta es que todas las baterías, sean del tipo que sean, van perdiendo carga poco a poco cuando no se usan. Esto es muy importante en el caso de las baterías de ión de litio, ya que esta pérdida puede hacer que la batería quede vacía y se eche a perder sin que siquiera nos demos cuenta.

Hay otras tecnologías de baterías (níquel-cadmio, plomo, etc). Pero son tecnologías que hoy en día están obsoletas, o relegadas a nichos, y por tanto no hablaré de ellas (al menos en el artículo de hoy).

Resumiendo. Si nuestro móvil, portátil o netbook usa una batería de ión de litio deberemos cargarlo tan pronto como nos sea posible (incluso aunque la batería esté a medias), procurar usarlo regularmente Y apagarlo o evitar usarlo cuando nos dé batería baja y no tengamos el cargador. En el caso de los portátiles, NUNCA deberemos quitar la batería cuando estemos en casa: la pérdida de carga acabaría dañándola. Es mejor usarlo con batería y enchufarlo cuando se gaste. Por supuesto, sólo debemos plantearnos comprar una segunda batería cuando vayamos a usarla regularmente. Si no, estaremos tirando el dinero.

Por el contrario, con aparatos que usen baterías de metal hidruro (por ejemplo, las cámaras de fotos a pilas), deberemos usar las baterías hasta agotarlas, y sólo entonces hacerles una carga completa.

Por último, si tenemos un dispositivo que funciona a pilas y que sólo vamos a usar ocasionalmente (el MP3 que usamos para grabar conferencias, la cámara que le regalamos a mamá para que fotografíe a sus nietos...), es mejor que lo usemos con pilas alcalinas (o incluso salinas, si el consumo nos lo permite: el medio ambiente nos lo agradecerá).

sábado, 6 de febrero de 2010

Mitos y verdades sobre las baterías (I)

Nos dicen muchas cosas sobre las baterías:
    "Si vas a enchufar el portátil a la corriente, quítale la batería" "Tienes que agotar la batería antes de cargarla" "Si cargas la batería a medias se estropea" "Deja el móvil cargando; cuando la batería esté llena, se desconectará él solo"
Pero, ¿son realmente ciertas? Resulta que algunas sí, otras no, y otras depende. Vamos a ver porqué. Los que tengáis prisa, podéis saltaros toda la teoría e ir directamente a los consejos de uso :-) .

Lo primero que hay que saber es que hay diferentes tipos de baterías. Los dos más frecuentes, NiMH (níquel-metal-hidruro, o símplemente metal-hidruro) y Li-ion (ión de litio), se comportan de forma radicalmente diferente. Y de ahí viene mucha de la confusión: lo que es cierto para uno de esos dos tipos habitualmente es rotundamente falso para el otro.

Empecemos con las baterías de ión de litio, las más frecuentes en dispositivos móviles. Son baterías que almacenan una gran cantidad de energía por unidad de peso y son capaces de proporcionar mucha corriente, lo que las hace ideales para estos usos. Además, no tienen "efecto memoria", por lo que no hay problema en recargarlas cuando todavía están a medias o desenchufarlas antes de completar la carga. En cambio, pueden resultar dañadas si se cargan demasiado o se descargan completamente. Lo primero no es problema, ya que la propia batería suele incorporar un circuito de control de carga para evitarlo. Pero lo segundo es importante. Por tanto, en los aparatos que usen baterías de este tipo, debemos apagarlos o conectarlos al cargador tan pronto como nos indique que la batería está baja. Si puede ser antes, mejor.

Otro problema de las baterías de ión de litio es que hay que hacerles, como mínimo, un ciclo de carga-descarga al mes para mantenerlas en condiciones óptimas. Si no lo hacemos, la batería perderá capacidad rápidamente, puede que en tan sólo unos meses. En todo caso, por muy bien que las tratemos, las baterías de ión de litio perderán entre un 10% y 20% de capacidad cada año, por lo que la vida útil de este tipo de baterías está limitada a unos pocos años.

En el siguiente artículo hablaremos de las baterías de metal-hidruro.

jueves, 28 de enero de 2010

Apple iPad: decepcionante

Supongo que a estas alturas ya lo sabréis. Apple ha presentado ayer su esperado tablet PC. Y tan esperado. Ha sido uno de los secretos peor guardados en Cupertino.

La configuración no sorprende a estas alturas. Procesador a 1 Ghz (probablemente basado en ARM, al igual que las líneas iPod, iPod Touch e iPhone, pero habría que confirmarlo), integrado en un sistema-en-un-chip diseñado por Apple. Pantalla de 9.7" a 1024x768 (por tanto no panorámica, y esta es una de las pocas sorpresas) y con superficie multitáctil. 16, 32 o 64 GB de memoria flash, soporte Wi-Fi y Bluetooth, soporte 3G opcional, y sólo dos puertos: conector de auriculares y conector de dock (probablemente compatible con el del iPod/iPhone). Ni puertos USB, ni lector de tarjetas, ni teclado físico. Todos ellos los vende Apple aparte. Como sistema operativo, el iPhone OS. Y en el apartado de software, incorpora navegador, cliente de correo, mapas, librerías de fotos, vídeo, música y libros, y una pequeña suite de productividad (contactos, calendario, bloc de notas). Podéis comparar estas características técnicas con las que predije el verano pasado, y veréis que acerté casi en todo. Sólo me equivoqué en el procesador, que creía (sinceramente) que sería un Intel Atom.

Pasada la emoción inicial, analicemos qué tenemos entre manos. Es un ordenador con pantalla táctil de 10", un procesador modesto, y una capacidad de almacenamiento limitada (aunque suficiente para la mayor parte de los usos). Se puede considerar un iPod grande o un netbook táctil. Sin embargo, queda a caballo entre los dos mundos: su tamaño le hace perder portabilidad, y las limitaciones de su sistema operativo (iPhone OS, el único sistema moderno monotarea) y la falta de teclado físico le hacen perder funcionalidad. Y por si esto fuera poco, el iPad está limitado por el talón de Aquiles del iPhone: la App Store. Sólo es posible instalar y usar software bendecido por Apple, lo que dificultará o impedirá que se vean aplicaciones interesantes (recordad lo que pasó con Skype u Opera - y eso que no soy precisamente fan de las compañía noruega, ya sabéis).

Pero lo peor es el precio. El modelo básico, con 16 GB de memoria flash y sin soporte 3G, cuesta 499 dólares estadounidenses. Los modelos con soporte 3G cuestan 130 dólares más que las normales. Y el más caro de la gama llega a los 829 dólares. A lo que hay que sumar el absolutamente necesario lector de tarjetas y, quizás, también el teclado externo. Que no creo que cuesten menos de 30 y 50 dólares, respectivamente.

Pero, ¿cuánto costará en España? Ahora mismo, el iPod Nano 5G de 8 GB cuesta 149 dólares en Estados Unidos y 139 Euros en España. Así que no creo que el precio del iPad por estos lares sea de mucho menos de 500 Euros. Una pasada, cuando no es difícil comprar por 250 Euros un Acer Aspire One 250 (por ejemplo) con Windows 7, 250 GB de disco duro y toda una suite de herramientas multimedia, que, si bien menos elegante, puede hacer todo lo que hace el iPad, y mucho más.

No sé qué pensar. Espero, por el bien de Steve Jobs, estar equivocado. Pero creo que Apple ha patinado con este lanzamiento. Le sobra precio y le falta flexibilidad. De momento, ni se me pasa por la cabeza el considerar comprarlo. Los chicos de Jobs se lo tendrán que currar para conseguir cambiar mi forma de pensar.

Ficha técnica

Categoría: hardware / netbook
Fabricante: Apple
Producto: iPad
Plataforma: iPhone OS
Web: http://www.apple.com/ipad/ (en inglés)
Precio: entre 499 y 829 dólares EE.UU.
Lo bueno: Diseño. Software sencillo e integrado. Calidad de fabricación.
Lo malo: Limitado y poco potente por culpa del software. Caro. Dispositivos imprescindibles, como puerto USB, lector de tarjetas o teclado físico, vendidos por separado.